sábado, 14 de abril de 2012

Capitulo 7 - no se nadar

- Que incomodidad - digo despues de 5 minutos sin hablar.
Estaba sentada en el mantel de picnic, con Nathan al lado.
- Ya... - se río nervioso.
Me levanto energéticamente. Y me vuelvo a levantar porque me había caído de nuevo al mantel. Nathan se tapaba la boca para evitar soltar una carcajada.
- Ahora vuelvo. Me voy a hacer una llamada.
- No se con que...
Me alejop de Nathana y voy detrás de un árbol. Cojo mi móvil y marco el numero de Tiffani.
- Me cago en la puta - grito. No tenía cobertura. Nathan se estaba riendo a carcajadas. Salgo de detrás de, árbol y le lanzo una mirada fulminante.
Voy al pequeño lago que estaba a escasos metros de nosotros, undo mis manos en el y le lanzo agua a Nathanen la cara. Escupe un chorro de agua que le había entrado en ña boca y me mira como si hubiera asesinado a su gato.
- Estas muerta - dice tan tranquilo. De repente se levanta, viene a mi y me agarra por la cintura. Me tira dentro del congelado lago y me deja allí mientras el se sienta en el mantel, escurriendo lo poco que le había mojado en la camiseta.
- No... Se... No se nadar... - miento haciendo como si me ahogara.
Nathan me mira preocupado. Se levanta rápidamente y corre hacia el lago. Hace un salto alto y llega a unos pocos centímetros de donde yo estaba. Se acerca a mi y me pone la mano en el hombro. Y yo, jodiendo cualquier momento, le hundo la cabeza en el agua y me pongos encima suya.
Lleva demasiado tiempo dentro del agua. Quizás le ha pasado algo.
Meto la mano dentro del agua y le encuentro. No respira. Lo saco del lago con mucho esfuerzo y le tumbo el la hierba.
- Ay dios, porque tendría que faltar a la clase de primeros auxilios.
Le aprieto el estomago varias veces para que escupa todo el aire. Nada. Le pegue varias veces en la cara para ver si recuperaba la conciencia. Nada.
Por favor señor, no me obligues a hacerlo.
Le Levante un poco la cabeza y le abrí la boca. Puse la mía sorbe la suya y sople. También llamado boca a boca. Nathan empezó a toser yo a tirar agua. Me separe de el rápidamente antes de que abriera los ojos.
- Joder, casi me das un infarto - grito
Se enderezo y se puso una mano en la cabeza. Me miro.
- Perdona pero no ha sido culpa mía eso de hundirme cuando yo me estaba preocupando por ti.
- Coño, te acabo de salvar la vida. Un poco mas de respeto.
Nos levantamos. Tenía la ropa empapada y el pelo también. Lo mas mínimo que podría hacer este "caballero" seria darme una toalla. Pero no. El muy lito se quita los pantalones, la camiseta y las zapatillas y se queda en calzoncillos
- Por favor, que aquí hay gente - me señalo a mi misma.
- Es para secar la ropa. Si me ven así me mataran, y seguramente a ti también.
- No pienso quitarme la ropa delante tuya.
- Aya tu. Pero no seria la primera vez que lo harías.
Me sonroje. ¿Me había desnudado delante de este tío? En cualquier caso, no lo volvería a hacer.
Bueno va. Me quite la camiseta. Mire a Nathan, que me miraba y sonreía. Me sonroje.
- ¡No mires!
Se río y se dio la vuelta. Me quite los pantalones que se pegaban a las piernas y eje la ropa en una piedra caliente que había por allí.
- ¿Ya? - pregunto Nathan
- Si, total, me ibas a ver tarde o temprano.
Se dio la vielta y rió. Me miro directamente a los ojos.
- Ven, vamos a casa, luego volveremos a por la ropa
- ¿Que? No, ni hablar. Esa blusa me costo mas de lo que cuesta el pueblo entero. No la voy a dejar aquí.
- Hablas de ella como si fuera una mascota de incontable valor.
Abrí la boca y luego la cerré. Si hablaba solo continuaríamos esta absurda conversación. Nathan se agachó y recogió el mantel. Me lo paso por encima de los hombros. Tirite. Por encima del mantel me paso el brazo por los hombros, quitándome un poco de frío.
- ¿Estas bien? - me pregunto.
– Seguiré diciendo que te he salvado la vida.
- Y te estaré eternamente agradecido - sonrió.

Ya habíamos llegado a la plaza. Jessica, Vanessa, Megan y dos chicos mas venían corriendo hacia nosotros.
- Alá que fuerte, ¿tan pronto lo habéis hecho? Que fuerte - grita Vanessa
- No piensas mal, gilipollas - digo - ¿y vosotros sois?
- Yo soy Jonathan, y el es Calan. Somos hermanos. Llegamos a este pueblo hace dos años. Tu seguro que serás Ana. Nos han hablado mucho de ti.
- Ah, pues encantada entonces.
- Buano, Ana, ahora nos darás una razón por lo que estas en pelotas y descalza aquí en medio
- Es una larga historia
- Tenemos tiempo. ¿Ay algo mas importante que nos quieas contar?
- Soy una heroína. Le he salvado la vida - señalo a Nathan, que se sonrojo.

2 comentarios:

  1. emm... vale¿? desnuda x el pueblo¿? jajaja q corte!
    me gusta me gusta... sigue escribiendo!!
    bss

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. bueno, no desnuda. mas o menos. En ropa interior.
      y me alegro de que te guste
      mil besos

      Eliminar